Descripción

Descubre Willa Koliba - Museo del Estilo de Zakopane, una joya ubicada justo al lado de la Calle Kościeliska en Zakopane. Este encantador lugar presume del antiguo estilo Goralska montañés, con una calificación promedio de 4.7 en Google, lo que lo convierte en una atracción imprescindible en la ciudad.

El museo es un destino perfecto tanto para los entusiastas de la historia como del arte, presentando artefactos de principios de siglo que representan hermosamente la cultura regional. Los visitantes se verán cautivados por la intrincada artesanía, desde las estufas de cerámica especialmente diseñadas hasta los interiores cuidadosamente decorados.

Con una tarifa de entrada de 49 zlotys para 2 adultos y 1 niño, ofrece un gran valor, especialmente porque también es adecuado para niños. Aunque el museo está en proceso de renovación para mejorar el acceso para sillas de ruedas y cuenta con poco personal que hable inglés, los impresionantes terrenos y jardines brindan un agradable telón de fondo para su visita. Tenga en cuenta que el museo cierra durante las horas de almuerzo.

Sumérgete en la cultura y tradición local con un viaje a Willa Koliba, un destino acogedor para aquellos apasionados por el arte, la historia y la arquitectura.

Mostrar más

Características

Adecuado para niños., Baño

¿Cómo llegar aquí?

Las opciones de transporte público más cercanas para su conveniencia.

Zakopane Targowica
Parada de autobús 277 m caminar
Zakopane Strug
Parada de autobús 166 m caminar
Zakopane Górka
Parada de autobús 200 m caminar
Zakopane Szymoszkowa
Parada de autobús 648 m caminar

Reseñas y calificaciones

Escribe una opinión
4.8
basado en 276 opiniones
4.8/5 276 opiniones
Konrad Dach
Konrad Dach
1 mes hace en Google

Bardzo piękna chałupka 😘

Agnieszka Kalinowska
Agnieszka Kalinowska
1 mes hace en Google

Piękny budynek w naszych pięknych górach.

Bogusław Pochodowicz
Bogusław Pochodowicz
1 mes hace en Google

Witkiewicz to geniusz był! Piękny obiekt, dodatkowo zwiedzany z audiodeskrypcją bardzo wiele wnosi. Można oglądać godzinami. I kanapeczka zjedzona na werandzie też smakuje jakoś inaczej… Zdecydowanie warto