Vinoteca Salty Floor Natural en Lisboa: fotos, reseñas

Descripción

Salty Floor Natural Wine Bar es un encantador local en Lisboa, perfecto para quienes buscan disfrutar de una noche tranquila. Con una impresionante puntuación de 4,8, este acogedor establecimiento deleita con su cuidada selección de vinos portugueses y deliciosas tapas para compartir. Encontrarás un ambiente relajado, realzado por música en vivo y actuaciones, lo que lo convierte en un éxito tanto entre locales como turistas. El personal, bien informado, siempre está disponible para asesorar en los maridajes de vinos y comida, asegurando una experiencia memorable. Tanto si pasas por un bocado rápido como si te quedas la noche, el ambiente informal con terraza al aire libre y una política que admite perros lo hacen una opción acogedora para todos. Perfecto para una salida económica, los precios oscilan entre 10 y 15 EUR por persona, ofreciendo una gran relación calidad-precio sin sacrificar calidad.

Precio

$$$$ 10 - 15 EUR

Servicios

Para llevar, Asientos al aire libre, Comer en el lugar

Oferta

Se sirve alcohol, Platos pequeños, Servir cerveza, Servir vino, Sirviendo comida, Sirviendo comida en el bar

Pago

Pago solo en efectivo

Atmósfera

Informal, Acogedor

Estacionamiento

Estacionamiento en la calle, Estacionamiento gratis

¿Cómo llegar aquí?

Las opciones de transporte público más cercanas para su conveniencia.

Belém

Parada de autobús 485 m caminar

Av. Restelo (Estádio)

Parada de autobús 406 m caminar

Mosteiro Jerónimos

Parada de autobús 185 m caminar

R. Jerónimos

Estación de autobuses 55 m caminar

4.8

basado en 188 opiniones

Google

4.8/5 188 opiniones

Rob

Servicio: 5
Atmósfera: 5

Lovely experience and chat with the owner. Great wines and lovely vibes

Carine Minne

Amazing wine bar with fantastic knowledgeable manager and delightful atmosphere. Don’t miss this!

Kimberly Crosby

Comida: 5
Servicio: 5
Atmósfera: 5

The Salty Floor is an absolute gem in Belem! (And easily one of Lisbon’s standout spots). Whether you’re on your own or sharing time with friends, the inviting warmth and wine wisdom of the owner (she knows her wines!) will draw you in and make it hard to leave. It’s the kind of unpretentious place that invites you to slow down and savor. The space inside is cozy and intimate; outside, charming tête-à-tête tables on the sidewalk, perfect for a glass (or two or three) as a local or a tourist. The shareable plates are delicious - don’t miss the rillettes or the feijão verde (personal favorites). This isn’t the kind of place that gives you cheap peanuts and pretzels - the food is as good as the wine :) Add in the relaxed, dog-friendly atmosphere, and The Salty Floor becomes not just a wine bar, but a memory in the making. It’s the kind of place I’ll gladly return to every time I’m in Portugal.