Don Giovanni en Lisboa: fotos, reseñas

Descripción

En Lisboa, Don Giovanni ofrece una salida nocturna económica con un ambiente acogedor y informal, lo que lo convierte en un lugar ideal para reunirse con amigos. El menú incluye delicias como cerveza, causa, café y tostadas, todas con precios entre 5 y 10 EUR por persona. Si bien el servicio puede ser irregular, con algunas experiencias por debajo de lo esperado, el personal amable y atento destaca, creando un entorno profesional. Tanto si te apetece un cóctel en la happy hour como si prefieres ver deportes en sus pantallas, Don Giovanni satisface distintas preferencias. Con opciones de entrega, para llevar y con asientos tanto en interior como en exterior, este bar ofrece flexibilidad para distintas necesidades sociales.

Precio

$$$$ 5 - 10 EUR

Servicios

Entrega, Para llevar, Reservas disponibles, Asientos al aire libre, Comer en el lugar

Oferta

Se sirve alcohol, Bebidas de happy hour, Sirviendo cócteles, Servir cerveza, Servir vino, Sirviendo comida, Sirviendo comida en el bar

Pago

Pago con tarjeta de crédito, Pago con tarjeta de débito, Pago con NFC

Atmósfera

Informal, Acogedor

Mejor para

Reunirse con amigos

Platos y Bebidas

Descubre los platos destacados y las bebidas únicas que definen el menú de Don Giovanni.

Cerveza
Causa
Café
Tostada

¿Cómo llegar aquí?

Las opciones de transporte público más cercanas para su conveniencia.

R. Prof. Reinaldo Santos

Parada de autobús 123 m caminar

R. Carolina M. Vasc./ R. José P. Chaves

Parada de autobús 370 m caminar

Calhariz - R. Ten. Coronel Ribeiro Reis

Parada de autobús 64 m caminar

Calhariz

Parada de autobús 357 m caminar

3.9

basado en 694 opiniones

Google

3.9/5 694 opiniones

Matteo Mannelli

Comida: 5
Servicio: 5
Atmósfera: 5

Ottimo

Bruna Felix

Comida: 1
Servicio: 1
Atmósfera: 1

Adoram se aproveitar e cobrar coisas a mais dos clientes, tomem cuidado quando vierem a esse lugar.

Aline

Infelizmente, a minha experiência no Don Giovanni foi marcada por um atendimento decepcionante, que estragou o que poderia ter sido uma agradável refeição. O pior momento foi ouvir uma funcionária a falar mal de um colega – algo completamente **inapropriado** e constrangedor, num ambiente profissional. O mais irónico? Esse colega (que ela criticava) era justamente um simpático e atencioso, sempre a sorrir e a tentar tornar a experiência dos clientes mais agradável. Torço para que dê tudo certo na vida dele, porque é essa energia que um restaurante precisa. Dica: se querem evitar stress, digam logo à entrada: “Quero ser atendida pelo Benni, por favor” 😉