Local muy pequeño, mesas ridículas, muy cerca unas de las otras. Personal amable, correcto. Pizzas buenísimas, sin igual. La mejor carbonara que vas a probar. Lamentablemente, no tienen muchos entrantes. Tampoco muchos postres, pero su tiramisú no tiene rival. No me parece caro y creo que ahora hay menú mediodía con pizza. Estoy deseando volver.
Chicos, es imposible comer en verano en vuestro local del centro. El personal está completamente agotado y sudando, y adoro vuestras pizzas pero es imposible disfrutarlas con esas temperaturas. Hay más pizzerías con horno de leña en sala en las que se puede comer sin estar bañado en sudor. Por respeto a vuestra plantilla y a vuestros clientes, replanteaos por favor que algo hay que hacer. De momento he ido a comer y me he ido antes de pedir dos veces. Estáis perdiendo dinero. Y, además, hay demasiadas mesas juntas. Da más sensación de calor y agobio.
Gracias y espero de corazón que no os siente mal.