Bar Flor en Zaragoza: fotos, reseñas

Descripción

Bar Flor en Zaragoza es un animado lugar nocturno perfecto para ponerse al día con amigos o disfrutar de un bocado en solitario. Conocido por su ambiente informal pero acogedor, este bar ofrece un entorno desenfadado y con estilo donde el Wi-Fi gratis y los eventos deportivos en directo garantizan entretenimiento para todos. Disfruta de tapas económicas junto a una amplia selección de bebidas, incluidos cócteles, cerveza y vino. Tanto si prefieres comer en el interior como en la terraza, Bar Flor promete un servicio al cliente excelente con precios que no te arruinarán. Con posibilidad de reservar, no es de extrañar que este local tenga una alta valoración y se recomiende para una velada relajada.

Precio

$$$$ 1 - 10 EUR

Servicios

Reservas disponibles, Asientos al aire libre, Comer en el lugar

Oferta

Se sirve alcohol, Sirviendo cócteles, Servir cerveza, Servir vino, Sirviendo comida, Sirviendo comida en el bar

Pago

Pago con tarjeta de crédito, Pago con tarjeta de débito, Pago con NFC

Atmósfera

Con estilo, Informal, Acogedor

Mejor para

Reunirse con amigos, Cenas en solitario

¿Cómo llegar aquí?

Las opciones de transporte público más cercanas para su conveniencia.

Av. Compromiso De Caspe N.º

Parada de autobús 133 m caminar

Doctor Iranzo

Parada de autobús 215 m caminar

Rodrigo Rebolledo N.º

Parada de autobús 177 m caminar

Avda. Compromiso de Caspe

Parada de autobús 137 m caminar

4.4

basado en 194 opiniones

Google

4.4/5 194 opiniones

Daniel Barros González

Comida: 5
Servicio: 5
Atmósfera: 5

Magnífico bar para echar el vermut, buenas raciones, buena atención y precios asequibles.

Mery Roldán

Comida: 5
Servicio: 5
Atmósfera: 5

Atención de primera, buen café y buen ambiente

Alejandro Lahoz

Comida: 5
Servicio: 5
Atmósfera: 5

El bar donde se inventó la felicidad (y algún que otro dolor de cabeza) Voy todos los días y no es por costumbre, es por necesidad espiritual. Los tubos de cerveza de este bar no son normales: son los mejores de Zaragoza, fríos como el corazón de tu ex y más llenos que la nevera de tu madre el domingo. Los clientes… qué decir. Una fauna encantadora: borrachos, sí, pero especiales, como Pokémon en su última evolución. Aquí todo el mundo tiene una historia que contar y probablemente se le olvide al día siguiente. La comida está tan buena que hasta la tragaperras aplaude cuando sacas una tapa. Hablando de eso, la tragaperras no decepciona: reparte más emociones que una final del Zaragoza en penaltis. En resumen: si vienes una vez, repites. Si repites, te quedas. Y si te quedas, bueno... ¡bienvenido al club!