Descripción

Casa Piriquita en Lisboa es un lugar encantador donde el aroma de los pasteles portugueses recién horneados te da una cálida bienvenida. Conocida por su servicio muy recomendable y amable, este pintoresco establecimiento se especializa en deliciosos desayunos y café aromático. Entre sus ofertas, los pasteles de crema de huevo rellenos de almendra destacan como una opción popular. Sin embargo, son los Travesseiros, su producto más vendido, los que realmente conquistan el corazón de locales y visitantes por igual. Con un nivel de precios moderado y una notable calificación promedio de 4.5 en Google, esta panadería es una parada imprescindible para quien busque experiencias auténticas de postres portugueses. Además, cuenta con un aseo en sus instalaciones, lo que la hace un lugar cómodo para empezar el día.

Mostrar más

Precio

$$$$

Comidas

Desayuno

Oferta

Sirviendo postres, Sirviendo café

Pago

Pago con tarjeta de crédito, Pago con NFC

Accesibilidad

Entrada accesible para sillas de ruedas, Baño accesible para personas en silla de ruedas

Características

Baño

¿Cómo llegar aquí?

Las opciones de transporte público más cercanas para su conveniencia.

Av. João XXI / Pç. Londres
Parada de autobús 206 m caminar
R. João Vilarett
Parada de autobús 235 m caminar
Av. Roma (Piscina)
Parada de autobús 46 m caminar
Av. João XXI
Estación de autobuses 232 m caminar
Roma - Areeiro
Estación de tren 331 m caminar

Reseñas y calificaciones

Escribe una opinión
4.5
basado en 312 opiniones
4.5/5 312 opiniones
Larissa
Larissa
1 mes hace en Google

Quisemos experimentar a pastelaria por recomendação. Recomendamos sem dúvida. O recheio de creme de ovos com amêndoas é muito bom. No entanto, bastou-me experimentar uma vez. No entanto, esta é apenas a minha opinião pessoal.

Rui Ferro
Rui Ferro
2 meses hace en Google

Os melhores “travesseiros” do mundo, mais calmo que em Sintra mas o local não é tão fantástico como o original

Tall RedEasel
Tall RedEasel
3 meses hace en Google

Special portuguese pastry shop. You won't leave empty-handed.