Adega Das Mercês en Lisboa: fotos, reseñas

Descripción

Adega Das Mercês es un lugar encantador en Lisboa, perfecto para un almuerzo o cena relajados. Este acogedor restaurante es conocido por sus auténticos platos portugueses, ofreciendo comida casera con sabores increíbles. Tanto si cenas solo como si te reúnes con amigos, disfrutarás del ambiente informal y acogedor. El menú incluye una deliciosa selección de quesos y vinos, además de buenas cervezas, cafés y postres. Con platos tan memorables que fueron lo más destacado de un viaje de diez días, no es de extrañar que este sitio esté muy recomendado. Los precios son asequibles, siendo posible disfrutar de una comida completa por solo 44 €, y se recomienda reservar para asegurarte un lugar donde disfrutar de sus deliciosas propuestas.

Precio

$$$$ 15 - 20 EUR

Comidas

Almuerzo, Cena

Cocinas

Portugués

Servicios

Reservas disponibles, Comer en el lugar, Se recomienda hacer reservaciones

Oferta

Se sirve alcohol, Sirviendo postres, Servir cerveza, Servir vino, Sirviendo café

Pago

Pago con tarjeta de crédito

¿Cómo llegar aquí?

Las opciones de transporte público más cercanas para su conveniencia.

Pç. Luis Camões (B. Alto)

Parada de tranvía 135 m caminar

Calhariz (Bica)

Parada de tranvía 103 m caminar

Sta. Catarina

Parada de tranvía 170 m caminar

Baixa-Chiado

Estación de metro 269 m caminar

4.3

basado en 231 opinión

Google

4.3/5 226 opiniones

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4.3/5 5 opiniones

Fernando Osorio Gutierrez

Comida: 5
Servicio: 4
Atmósfera: 5

Comida casera con muy buen sabor. Restaurante atendido y frecuentado por locales.

Jean-Pierre Leger

Comida: 5
Servicio: 5
Atmósfera: 4

Bonne maison !

Miguel Silveira

Comida: 5
Servicio: 5
Atmósfera: 5

Que incrível surpresa! Trouxe um amigo de UK para experienciar comida típica portuguesa e que melhor prato para experienciar que não um arroz de cabidela cá dos nossos? Queria um restaurante típico, nada de coisas fancy, algo português e somente português, o que nesta altura é tão mas tão raro em lisboa. Este restaurante foi dos sítios que mais nostalgia me deu, era este ambiente que todos deveriam ter. Um pequeno cantinho de céu no bairro alto. Uma das melhores cabidelas e sobremesas que comi nos últimos anos, talvez fosse do ambiente, ou do empregado que tão bem nos recebeu e serviu, ou talvez por nada em particular e fosse realmente a comida incrível.. o que é certo é que me trouxe memórias tão longínquas como as de casa dos meus avós onde nada era acrescentado à comida de especial se não bons ingredientes e amor. 23€ p/p por presunto/queijo, azeitonas, pão, vinho, cabidela(que sobrou), sobremesa e cafés! Certamente recomendado e local futuro para as nossas tertúlias regulares. Um grande bem haja aos donos deste estabelecimento