Ginebra

El centro empresarial y político de Suiza está situado en el suroeste, junto al lago Lemán. Cumbres internacionales, conferencias científicas, bancos legendarios y los relojes más precisos del mundo: todo esto es Ginebra.

Las principales atracciones de Ginebra se esconden en las estrechas calles del Casco Viejo. Incluya en su plan de visita a la ciudad un recorrido por la catedral de San Pedro, la universidad, el Muro de la Reforma en el Parque de los Bastiones. Son populares los museos de historia del arte, etnografía, Patek Philippe, etnografía y la galería MAMCO. La vida cotidiana de los habitantes desde la Edad Media hasta el siglo XIX se puede rastrear en la residencia privada más antigua, la Casa Tavel.

Para obtener fotografías impresionantes, diríjase al Jardín Inglés con su reloj de flores, o al mirador en la confluencia de los ríos Ródano y Arve. La mejor vista panorámica de la ciudad se obtiene desde la plataforma superior del teleférico en la montaña Salève.

Desde la estación de tren hasta el lago, los turistas pasean por el distrito de Paquis, con decenas de hoteles, restaurantes y clubes nocturnos. A lo largo del malecón se encuentran los embarcaderos de ferris, el club de yates y las piscinas públicas. A través del puente peatonal móvil, se puede caminar fácilmente hasta la famosa fuente Jet d'Eau de 140 metros de altura en el lago. Por la noche, se organizan espectáculos de luz y música junto a la fuente.

Para inspiración creativa, visite las galerías del barrio de Les Bains. Atrapa a los turistas el barrio bohemio de Carouge, con teatros y salas de arte. La mejor zona para disfrutar de la naturaleza es Eaux-Vives, con playas y parques.

No muy lejos de la ciudad se encuentra el famoso CERN, con el colisionador de hadrones y la Fábrica de antimateria. Para excursiones al espacio científico interactivo Science Gateway, debe reservar con anticipación.

El aeropuerto internacional de Ginebra ofrece vuelos directos a ciudades de EE. UU., Europa, África del Norte y Central, y países del Golfo Pérsico. En tren de alta velocidad, es fácil llegar al centro de la ciudad desde Francia, Italia y los países del Benelux.

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